Para empezar rico, seguro y sin tabúes
El sexo anal sigue siendo de esos temas que generan nervios, dudas y mil mitos. Pero la realidad es simple: sí, se puede disfrutar… y muchísimo 😏💦
La clave está en saber cómo empezar, en escuchar el cuerpo y en elegir posturas que ayuden a que todo fluya sin dolor y con mucha excitación. Si querés ir un pasito más atrás y entender cómo preparar tu cuerpo desde cero, te dejo este otro artículo que te va a servir un montón: 👉 Explorá el Placer Anal: Guía Para Principiantes
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Y ahora sí… si ya tenés la base clara y estás con ganas de pasar a la acción. Aquí tenés las posturas más amigables para arrancar desde cero, con info clara y consejos reales.
Primero lo importante: relajación + excitación= combo ganador🏆
Para que el sexo anal sea realmente placentero, lo fundamental es que la persona que va a ser penetrada esté relajada y bien excitada. Nada de apuros, nada de ansiedad. Este es un momento para disfrutar, no para “cumplir”.
¿CÓMO SE LOGRA?
✅EMPEZÁ POR FUERA SIEMPRE: Tocá alrededor del ano con suavidad, circulitos, presión leve, rozaditas. El objetivo es que el cuerpo empiece a aflojarse solo.
✅CARICIAS QUE BAJAN LA GUARDIA: Manos lentas, masajes en la cadera, glúteos, muslos... tu misión es relajar el cuerpo, porque así se relajará el esfínter.
✅BESOS Y JUEGO PREVIO (PERO DEL RICO): Mientras más excitadx estés, más fácil se dilata la zona. Agregá besos, miradas, roce… todo suma.
✅NO VAYAS DIRECTO AL PUNTO: Primero alrededor, después un dedo o un juguete chiquito si querés. Nada brusco. Nada sin comunicación. El asterisco te avisa cuando está listo.
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✅LUBRICANTE: Este es tu mejor amigo, el ano no lubrica por sí mismo, así que aquí la regla es MÁS ES MÁS, utiliza lubricante en abundancia, incluso más del que pensás que necesitás. Y si hace falta, agregá otra vez. Su misión es relajar suavemente y hacer que todo se sienta mucho más cómodo
✅UN PLUG ES UN GOLAZO: Para ir aflojando la zona sin presión ni apuro. Metés, sacás, jugás… hasta que el cuerpo responde. El plug es la mejor forma de “calentar el equipo” antes de la penetración.
✅SI NO HAY RELAJACIÓN, NO HAY PENETRACIÓN: No fuerces nada, Si molesta, parás, respirás y cambiás de ritmo. El objetivo es placer, no incomodidad.
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Si querés arrancar de forma segura, existen kits armados para principiantes como nuestro COMBO KIT PLUG ANAL ONYX con todo lo necesario: tamaños progresivos, lubricante y materiales cómodos para iniciarse sin miedo.
🔥 Ahora sí… las mejores posturas para iniciarse sin drama
Estas son las posturas que mejor funcionan para empezar, porque permiten controlar el ritmo, la profundidad y la intensidad.
AMAZONA A LA INVERSA
Ideal para principiantes. Vos quedás arriba, de espaldas a tu pareja, lo que te da control total del ritmo y la profundidad. Nada de sobresaltos ni sorpresas: solo ir marcando el paso a tu ritmo y disfrutando cien por ciento del placer.
LA CUCHARITA
Mezcla perfecta de intimidad, control y comodidad. Ambas personas se acuestan de costado, pegaditas, lo que hace que la penetración sea suave, poco profunda y súper fácil de manejar. Es de esas posturas que son un mimo y un fuego al mismo tiempo: crea cercanía, romanticismo y mucha excitación. Podés hacerlo en la cama, en el sillón o donde pinten las ganas. Una persona queda detrás, abrazando la cadera de la otra, y desde ahí todo fluye con calma, calorcito… y mucho placer para un “primer paso” ideal.
MISIONERO AL REVÉS
Una postura clásica, pero adaptada para disfrutar del sexo anal de forma suave y segura. Te acostás boca abajo, relajadx, mientras tu pareja se coloca de rodillas detrás, sosteniendo tu cadera para acomodar el ángulo. El movimiento es lento, controlado y súper amable para quienes recién empiezan: la penetración entra con más facilidad, el cuerpo se relaja y el contacto piel con piel suma muchísimo a la entrega. Es simple, íntima y muy placentera.
MONTAÑA MÁGICA
Postura tierna, íntima y perfecta para quienes quieren empezar despacito pero con mucha conexión. Armá una montañita de cojines, recostate encima con las piernas apenas abiertas y dejá que tu cuerpo se vaya relajando. Tu pareja se acomoda detrás, abrazándote mientras ajusta su cuerpo al tuyo. Esa posición hace que todo sea suave, controlado y súper seguro, pero al mismo tiempo… deliciosamente excitante. Ideal para quienes quieren combinar contención + placer + un ritmo que fluye solito.
LA SUMISIÓN
Apoyás tu peso sobre los antebrazos y el vientre, dejando las piernas abiertas y la cadera relajada para que todo fluya sin tensión. Tu pareja se coloca detrás, apoyándose sobre sus brazos y acomodando sus piernas por fuera de las tuyas para iniciar la penetración con calma y control. Es una posición suave, fácil de manejar y perfecta para disfrutar sin apuros.
“A veces la clave no es intentar más fuerte… sino más lento”
¿Ya te animaste a un poquito más?😈
Cuando ya estás más sueltx, con muchísima más confianza podés subir la intensidad:
DULZURA ORIENTAL
La postura perfecta cuando ya están bien encendidos y buscás una mezcla de placer + control suave. Te acostás boca arriba con las piernas un poco abiertas y las rodillas dobladas. Tu pareja se sienta entre tus piernas y te eleva apenas la cadera para que la penetración entre más guiada, lenta y calentita. Ideal para seguir aflojando el cuerpo y disfrutar sin presión.
LOTO RECLINADO
Una postura íntima y súper contenida, ideal para quienes aman el contacto piel con piel. Te recostás y levantás las piernas cruzadas en el aire, sosteniendo suavemente tu propio cuerpo. Tu pareja apoya los brazos a tus costados para afirmarse mientras entra despacio. La sensación es de profundidad, lentitud y conexión total. Perfecta si buscás control, calma y un ritmo que puedas ir manejando sin tensión.
DE PIE
Simple, directa y MUY excitante. Ambxs de pie, con tu pareja detrás tuyo. Apoyás una mano en la pared o en un mueble, arqueás un poquito la espalda y dejás que te acerque con su cadera. Si querés un ángulo mejor, apoyá una pierna en una silla: la penetración se vuelve más diagonal, cómoda y sorprendentemente placentera. Ideal para quienes ya están bien calientes y quieren algo práctico.
EL CANGREJO
Atrevida, distinta y una bomba cuando ya venían bien calientxs. Tu pareja se sienta en el borde de una mesa o mesada, con las rodillas flexionadas. Vos te colocás adelante, de espaldas, inclinándote ligeramente hacia abajo. Con las piernas abiertas, te impulsás con los pies hasta apoyar tu pelvis contra la de tu pareja… y sos vos quien inicia la penetración y marca el ritmo. Tu pareja te sostiene la cadera, pero el control lo llevás vos. Postura intensa, juguetona y PERFECTA para el final.
🧼Antes y después: cuidados básicos
El sexo anal también tiene su parte práctica, y es clave para que la experiencia sea segura, cómoda y placentera. Recordá que al inicio una buena higiene marca la diferencia: lavate suavemente, asegurate de que tus manos estén limpias y, si querés ser más delicadx con la zona, podés usar un jabón íntimo específico. Durante la práctica, el preservativo es obligatorio para evitar infecciones de transmisión sexual. Y cuando terminan, una limpieza simple y relajada ayuda a que el cuerpo se recupere y te deja con una sensación fresca y cómoda. No es glamour… ¡pero sí es parte del ritual del placer! 😉
¿Roles? Todxs pueden disfrutar🙌
El sexo anal no tiene dueñxs ni reglas fijas. Da igual tu género, tu cuerpo o el de tu pareja: es una práctica para quien tenga ganas de explorar. Si les pinta invertir roles, un strap-on abre posibilidades infinitas. Y lo mejor: podés usar cualquiera de las posturas anteriores sin cambiar nada. Lo único que cambia es quién lleva el ritmo… y eso también puede ser parte del juego.
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Si querés arrancar con el pie derecho o mejor dicho, con el asterisco relajado tener los productos adecuados hace toda la diferencia. En VIBRA tenemos kits, plugs y lubricantes anales pensados especialmente para principiantes, para que tu primera vez no solo sea placentera… sino inolvidable. Un buen plug para ir aflojando, un lubricante rico para acompañar, y un ritmo que respete tu cuerpo: esa es la fórmula. De ahí para adelante… todo es disfrute🍑✨
